Xundabé Ediciones 9º y 10º



Al hacer la décima entrega de ésta página, nos encontramos ya en el umbral de un año que ha sido importante para nuestro grupo de escritores, porque durante él, hemos podido aumentar los conocimientos literarios, que de una forma tan decidida y desinteresada han aportado nuestros jóvenes estudiantes que prestan su servicio social estudiantil en nuestro grupo de talleristas. A ellos dedicamos ésta, nuestra última entrega de este año que culmina; ya que a ellos debemos todos los logros obtenidos durante estos últimos doce meses.


Es pues el momento de los balances, que se hacen en la empresa, en el estudio, en la familia o a nivel personal, para determinar que tan bueno y fructífero o que tan malo y negativo fue nuestro desempeño durante los últimos trescientos sesenta y cinco días del año, y es también, el tiempo que dedicamos para hacer los buenos propósitos que realizaremos en el próximo año, del cual esperamos que nos traiga mejores oportunidades, o nos permita realizar nuevos sueños, y fortalecer los que con tanto empeño hemos logrado realizar en éste.


¡GRACIAS JOVENES ALFABETIZADORES POR SU APOYO INCONDICIONAL!

Y es que, hay años tan bellos, que los sentimos pasar por el corazón. Son años cargados de alegrías, de esperanzas. Son años que al recordarlos nos hacen sentir más jóvenes. Son años que no pasan, al contrario, pasan tan rápido que quisiéramos detenerlos, pues en cada vivencia nos encontramos sonrientes, felices. Y este ha sido para nosotros uno de esos años maravillosos que no quisiéramos olvidar nunca.

Pero, hay años que nos hacen sentir sin fuerzas, que nos debilitan y que deseamos que terminen muy pronto. Son años tristes, quizá con marcadas ausencias, quizá con un adiós que quedó grabado a fuego en la memoria, o tal vez con pérdidas tan grandes que hasta,
nos hacen sentir, que estamos perdidos navegando sin rumbo. Son años en los que pesa el dolor, la angustia, y en los que duele el pecho y un nudo nos aprieta la garganta.

Hay años que por ser tan lindos, guardamos como un tesoro el almanaque para recordarlo siempre, porque precisamente, nos han dejado los mejores recuerdos de lo mucho que esperábamos y logramos conseguir con nuestro propio esfuerzo y con entera satisfacción personal o colectiva.

Hay años que preferimos arrancar del almanaque para poder olvidarlo para siempre. La vida no es fácil a veces, cuesta enfrentar el dolor, cuesta mucho decir adiós a quien amamos, cuesta ver en la casa lugares que nunca pensamos que podrían quedar vacíos, cuesta mucho enfrentar la enfermedad y muchas veces nos cuesta aún más volver a comenzar, volver a levantarnos para seguir adelante; nos cuesta mucho despedirnos del lugar que habitamos durante tantos años y que el destino nos llama a dejarlo para continuar en otros lares.

Pero llega un nuevo año, la vida continúa y nunca sabemos qué hay detrás de tantas emociones, de tantos sentimientos, de tantas vivencias. Sólo debemos apostar con fe y esperanza, un futuro mejor y a una vida llena de muchas oportunidades de progreso, de prosperidad, de bienestar personal, familiar, de empresa, de grupos solidarios y de cooperación colectiva.

Por eso levantemos la copa y brindemos, deseando que cada burbuja explote y nos salpique con el verdadero amor de amigos, de padres, hermanos, compañeros de trabajo o de juego; con deseos de paz, felicidad y de todo lo lindo y maravillosos que todos nos merecemos, para seguir viviendo amable y dignamente con nuestros semejantes.

FELICES PASCUAS Y UN PROSPERO Y VENTUROSO AÑO NUEVO, LLENO DE AMOR, DE PAZ Y DE ALEGRÍA!!
SON DESEOS FERVIENTES DE “XUNDABÉ” TALLER DE ESCRITORES, PARA USTED Y TODOS SUS SEGUIDORES Y COLABORADORES.

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